Alerta en Reino Unido tras cientos de casos de pancreatitis aguda después de tomar Ozempic
Las autoridades sanitarias no confirman que ambas cosas tengan relación, pero tampoco lo descartan. Piden ponerse en contacto para iniciar un estudio.
Cada vez es más frecuente el uso de medicamentos para bajar de peso. Ozempic fue el primero en llegar, y quizá el más famoso, y tras él vinieron Mounjaro y Wegovy. Durante un tiempo hubo una absoluta fiebre con esos medicamentos, después de que fuera publicitado por influencers de todo el mundo como un método rápido para perder peso.
De hecho, en las pasadas Navidades, la Agencia Española de Medicamentos (AEMPS) avisó de una posible falta de stock. Unos medicamentos que están siendo analizado muy cerca por las autoridades sanitarias de Reino Unido. Y es que son ya cientos de informes de pancreatitis aguda y crónica en personas que han tomado Mounjaro, Ozempic y Wegovy.
Ninguno está confirmado que la causa esté relacionada con la toma de estos medicamentos, pero tampoco está descartado. Por ello, la ha solicitado a las personas que los suelen tomar y que han sido hospitalizadas por pancreatitis que se pongan con contacto con la agencia, con el fin de llevar a cabo un estudio para tratar de predecir quienes corren un mayor riesgo de sufrir este tipo de reacciones.
Un estudio que ya ha comenzado, después de que nada menos que 294 personas hayan sufrido pancreatitis aguda y crónica tras consumir el ingrediente activo que se emplea en los medicamentos Ozempic y Wegovy, o después de tomar tirzepatida, en el caso de Mounjaro. El síntoma principal, explica la MHRA, es un dolor intenso en la zona del abdomen.
“Los porcentajes de pancreatitis observados en ensayos clínicos fueron bajos, pero sabemos que muchas personas ahora compran estos medicamentos de forma privada. Pequeños porcentajes en grandes cantidades significan que cada vez más personas desarrollan estas afecciones, aunque siguen siendo poco frecuentes”, explica el Simon Cork, profesor de fisiología molecular en la Universidad Anglia Ruskin, a .
Vendidos sin receta
Estos medicamentos, empleados también para tratar la diabetes, también han sido relacionados (sin confirmación) con diez fallecimientos, y en Reino Unido se pueden comprar de forma privada y sin receta médica. Se cree que cerca de 1,5 millones de personas tomas consumen estas inyecciones para bajar de peso. Por tanto, es importante contar con el control de los expertos.
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“Para la gran mayoría de las personas, estos medicamentos ayudan a perder peso y son sumamente seguros. En un pequeño número de personas, se presentarán efectos secundarios significativos, y es importante asegurarse de que estén bajo la supervisión de sus profesionales de la salud”, concluye el doctor Cork.
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