Puso al UAE a trabajar y el ritmo del equipo emiratí, seguramente, fue lo que le llevó a la victoria por delante de Van der Poel y Vingegaard, que reaccionó como un campeón.
Cuando yo corría el Tour, todo el mundo quería coger una escapada en días así.
El que golpea primero, como Philipsen, tiene premio doble. Los que pierden primero, como Evenepoel, Roglic y Carlos Rodríguez, tienen castigo doble.
Ver a qué altura estará Vingegaard es la gran incógnita de este Tour. La guerra de equipos, también la veo favorable al UAE.
El esloveno engancha al público, y eso es importante. Ha hecho más grande a La Vuelta y también él ha crecido gracias a ella.
Mejor corredor de siempre en esta carrera. Siempre que vino dio espectáculo, un cuarto triunfo muy merecido y con el que la gente se alegra.
Las fuerzas van muy justas entre los favoritos. A Roglic no le vieron que estuviera pasándolo mal y por eso no le atacaron.
No diría que La Vuelta está sentenciada, pero Roglic sí ha sido un paso importante. Quedan dos días todavía.
Hace justo una semana, titulaba este espacio con “Sobresaliente para el Kern Pharma”. Siete días después, con Berrade, toca subir la nota.
La nómina de esprinters se redujo por el abandono de Van Aert y tuvieron su opción. Sin el belga, Groves es el máximo favorito.
Llevaba muchos días en fuga quedándose a las puertas. El UAE, sin tener un líder claro, lo está haciendo muy bien.
Aún va a subir todavía más su caché, le veo con mucho futuro, inmenso. Es todavía muy joven.
Roglic irá con todo a situarse líder en Cuitu Negru. Todos esperarán a que se mueva el esloveno, estarán a la expectativa.
Más allá del esloveno, nadie está haciendo excesivo daño al O’Connor. El australiano va perdiendo tiempo respecto al del Red Bull, pero resiste contra los demás.
Casi todo el mundo se alegra de una victoria así, y hacerlo después de lo que pasó con Manolo Azcona es todavía más emocionante.
Veo al del Movistar como el corredor que más fortaleza ha demostrado hasta el momento, mientras que O’Connor es un misterio cada día.
El australiano sigue con casi 4 minutos de ventaja y quedan días muy duros, pero de momento va salvando y con margen.
Un ciclismo a la antigua usanza. Esto puede dar un vuelco cada jornada. Y ojalá siga así.
Todos sabemos cómo actúa Roglic. Está atacando y en Hazallanas le veremos atacando de nuevo, no tengo dudas.
Algunos conjuntos que no tienen aspiraciones al esprint o en la general piensa que queda mucho tiempo, pero las oportunidades se van escapando...
Más de uno seguro que se arrepiente de lo que ha pasado. A lo mejor no le sirve para ganar La Vuelta, pero sí para hacer podio.
Fue una etapa similar a los días previos, porque se escaparon solo dos corredores que no tienen mucho más que dar.
Entre un grupo bastante grande de corredores no hubo apenas diferencias. El que está un poco por encima es Roglic.
Pocos corredores se merecen así una alegría como Wout van Aert, aunque el belga lo tendrá complicado este martes en el Pico Villuercas.
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