El Aldama desconocido
Su 20% en triples contra Georgia fue una inesperada mala noticia. Llamado a ser el líder, está a tiempo de darle la vuelta a la situación, como toda la Selección. “Hay que hacer una reflexión interna”.
Por un momento, pareció que Santi Aldama estaba jugando el primer partido de su carrera en un Eurobasket metido en un túnel oscuro. Un jugador que suele tener un tubo lanzando triples, firmó un sorprendente 2/10 (20%), que contrasta con su porcentaje esta temporada en la NBA: 36,8%. Unas cifras inesperadas en un jugador habitualmente fiable, pero al que se vio frío, fuera aún del torneo. “El partido que hemos hecho no es aceptable”, explotó el canario todavía en caliente, consciente de que no habían dado la talla.
El debut de Aldama era uno de los momentos más esperados alrededor de la Selección en este inicio del Eurobasket. El ‘7’ de la Selección se estrenó hace dos años en Yakarta. Del Mundial salió dando señales después de su partidazo contra Canadá. La FIBA lo señaló como el nuevo referente del mercado español. En los Juegos, el ala-pívot de los Grizzlies se salió contra Grecia y, cuando ya se había puesto galones, tuvo que jugar tocado el tercer partido en Lille. Se fue a medias después de la derrota contra Canadá. Este debe ser su año, en el que por primera vez aparece como indiscutible número uno de la Selección. Un rol que, además, ha aceptado sin que parezca que le queda grande. “Acepto la responsabilidad y creo que estoy preparado”, dijo el pasado jueves en la entrevista que concedió a AS.
Por encontrarle alguna explicación, Aldama llega al Eurobasket corto de preparación. Estuvo sin jugar dos semanas, entre el amistoso de Málaga contra Portugal y el de Madrid ante Alemania. No jugó contra la República Checa ni en el doble enfrentamiento contra Francia. Eso ha podido pesar en el rodaje. Aldama sufrió en defensa contra Shengelia al principio del tercer cuarto. Lo más sorprendente, sin embargo, fue el porcentaje en el triple. Ni siquiera hizo buenas recepciones de balón y hasta eligió mal en ocasiones. Scariolo se desesperó en una de esas acciones. Justo delante de él, rehuyó un tiro cómodo. Luego botó y se perfiló mucho peor. Lanzó y falló. Aldama fue, en el fondo, la cara de la frustración de España. Y, como el resto de sus compañeros, ni siquiera fue capaz de rebelarse. Tiene, sin embargo, todo el torneo para hacerlo. “Lo hecho, hecho está. Hay que hacer una reflexión interna. No obstante, confío en mis compañeros”. En otros tiempos, con otros protagonistas, la Selección siempre se ha levantado. Veremos con nuevos protagonistas.
Noticias relacionadas
¡Tus opiniones importan!
Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de . ¿Buscas licenciar contenido? Haz clic .
Rellene su nombre y apellidos para comentar