Se desactiva el ‘terremoto Giannis’
El traspaso de Antetokounmpo parece mucho menos posible que hace unas semanas. El que sí está a punto de cambiar de aires es Kevin Durant.


Mientras la NBA consume sus Finales y busca nuevo campeón, en el momento culmen de la temporada a nivel competitivo, se siguen moviendo también las aguas del futuro, el mercado que pasará al primer plano en cuanto se cierre, con victoria de Thunder o Pacers, la Final 2025. Muchos expertos, analistas, insiders y ejecutivos de franquicias, han vaticinado en los últimos meses un verano de locura. La igualdad que impulsa el nuevo convenio (para bien y para mal) hace que muchas franquicias se sientan cerca del gran trampolín competitivo; además, la forma de estructurar la masa salarial cada vez se basa menos en generar espacio para firmar a jugadores que acaban contrato. Los traspasos son ahora una opción mucho más realista y, al mismo tiempo, un factor de inestabilidad que puede acabar, según como vayan cayendo las piezas del dominó, en una verdadera locura. Sobre todo si se mueven los reyes de la baraja, jugadores que por talento no deberían estar en el mercado pero que, en principio, estaban.
En principio: Giannis Antetokounmpo parece, ahora mismo, en ruta hacia una nueva temporada con Milwaukee Bucks, el equipo que lo drafteó en 2013 (número 15) y con el que ha sido dos veces MVP (2019, 2020) y una campeón y MVP de las Finales (2021). El griego (30 años) parecía haber agotado sus días en una franquicia que falló en el último gran golpe, la llegada de Damian Lillard, para darle un proyecto ganador. Otra temporada decepcionante, ya cuatro años sin pisar la final del Este, la grave lesión de Lillard que le hará perderse toda o casi todo la próxima temporada (y tiene 34 años) y las apreturas (escasas piezas de draft, contratos…) para hacer mejoras importantes en una plantilla que necesita muchos retoques: una receta que apuntaba a traspaso, a reconstrucción aprovechando el enorme botín que podrían obtener los Bucks por una súper estrella que, a su vez, podría ir a un equipo en el que tendría más opciones de ser campeón de nuevo mientras está todavía en sus años de prime.
A los rumores (todos hacen cuentas cuando un jugador como Antetokounmpo parece ponerse a tiro, cosa que pasa muy pocas veces) se añadió que los Spurs recibieron el número 2 del draft en la lotería. Sin el 1 que da acceso a Cooper Flagg y con un proyecto que ya tiene a Victor Wembanyama y De’Aaron Fox, una operación Bucks-Spurs parecía óptima para ambas partes. Los texanos podían entrar ya en el lote de los aspirantes al título y los de Wisconsin, recibir un lote (jóvenes, rondas de draft…) que realmente pusiera en marcha una nueva era de forma prometedora.
Sin embargo, con el paso de los días se ha ido enfriando la bomba Giannis. Las cuentas para llevarse a un jugador así siempre son complicadas, y ahora Brian Windhorst (ESPN) ha echado más agua fría al asegurar que la realidad es menos emocionante de lo que muchos creían, que los Bucks no quieren desprenderse todavía de Giannis y que este no va a forzar su mano y a pedir públicamente el traspaso. Así que lo más probable ahora mismo es que no pase nada: “No va haber traspaso de Giannis en un futuro próximo. En la NBA casi todo el mundo se ha hecho ya a esa idea. Los Bucks van a seguir contando con él y él no va a forzar su salida pidiendo un traspaso”. Según este periodista, la gerencia (John Horst) y el entrenador (Doc Rivers) han cerrado una hoja de ruta que pasa por mantener el núcleo duro del equipo y que con Giannis como líder se pueda acabar la fase regular entre los seis primeros del Este con la idea de que Lillard pueda llegar a tiempo justo ahí, para echar un cable en playoffs.
Durant, una operación a punto
Si con Giannis, por lo tanto, parece que va a haber calma, por ahora, y que ni siquiera los Spurs con su número 2 del draft como arma principal van a intentar una operación sísmica, sí que parece que Kevin Durant tiene, como ha estado cantado desde que los Suns cerraron una temporada calamitosa, los días contados en Phoenix. Su trapaso, y coinciden casi todos los expertos, se está negociando de forma intensa, y con varios frentes abiertos, y podría concretarse en los próximos, antes incluso del draft. Así lo ha asegurado Shams Charania (ESPN), que habla de operación inminente y que de unas conversaciones iniciales con entre seis y ocho equipos se ha pasado a tres pretendientes con verdaderas opciones: “El meollo de las negociaciones está ahora en tres frentes: con Houston Rockets, Miami Heat y Minnesota Timberwolves. Se ha dicho en una semana… yo creo que se puede hacer incluso antes. Hay conversaciones muy avanzadas”.
Parecen fuera de la ecuación los Knicks, siempre una opción peliaguda por su poca flexibilidad para operar en una gran operación, y los Spurs, que otra vez sonaban con fuerza porque se contaba con ellos como un equipo activo en el mercado para dar un gran salto adelante en el tercer año de Wembanyama. Sin embargo, lo que se filtra es que en San Antonio tienen dudas sobre cuánto va a durar el nivel máximo de un KD que tiene un largo historial de lesiones y empezará la próxima temporada con 37 años.
Joh Gambadoro, que cubre la información de los Suns, entiende que la puja está siendo importante (lo que puede echar atrás a los Spurs) porque la franquicia de Arizona no está dispuesta a facilitar una salida del alero a un destino de su gusto si no es a cambio de un retorno de primer nivel: “Los Suns van a hacer el traspaso que mejor les venga a ellos, este no es uno de esos casos en los que Durant va a decir enviadme a tal equipo y le van a hacer caso”.
Westbrook elije salir al mercado
Otro jugador que estará en el mercado, en su caso como agente libre y ya en el declive de su (ilustre) trayectoria NBA, es Russell Westbrook. El base, también según información de ESPN, no va a hacer uso de la player option que tenía a su disposición para seguir (firmó por dos temporadas en formato 1+1) en Denver Nuggets. Va a renunciar a ese año de contrato (3,4 millones de dólares) para convertirse en agente libre el 30 de junio y buscar un acuerdo con más dinero garantizado (más temporadas).
Westbrook, (36 años) llegó a Denver tras salir mal de los dos equipos de L.A., Lakers y Clippers, y promedió 13,3 puntos, 4,9 rebotes y 6,1 asistencias en 75 partidos. Tuvo tramos buenos, mejor que en California (sobre todo en comparación con su etapa en los Lakers), pero volvió a acabar mal por sus habituales problemas (algunos picos entre valles muy profundos) de los últimos años en playoffs. Cuando los Nuggets fueron eliminados por los Thunder, en semifinales del Oeste y después de una serie tremenda resuelta en siete partidos, Westbrook pasó por el quirófano por un problema de ligamentos en la mano derecha. En teoría, este no le impedirá estar listo para iniciar la próxima temporada sin problemas, así que ahora solo habrá que ver qué franquicia es la que apuesta ahora por él. Ya ha jugado en Thunder, Rockets, Wizards, Lakers, Clippers y Nuggets.
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