Gran victoria de la ‘locomotora’ Romeo: “21 años para lograrlo”

El todoterreno Van der Poel, nieto del mítico Raymond Poulidor, despertó ayer con ganas de batalla. Pese a su maltrecha muñeca ni a tener en el pelotón de Dauphiné a Pogacar, Vingegaard o Evenepoel, el holandés del Alpecin decidió agitar el avispero desde el inicio de la tercera etapa entre Brioude y Charantonnay. Van der Poel atacó y forzó más ataques hasta que el centro de la colmena, el líder, Jonathan Milan, sacaba bandera blanca y se quedaba del pelotón.

Los fugados, después de idas y venidas, finalmente se quedaban en 13 ciclistas con Van der Poel, el alemán Lipowitz, el colombiano Tejada o Iván Romeo, del Movistar, como nombres más destacados. Llegaron a tener una máxima ventaja de tres minutos de renta mientras iban pasando los puertos previstos en una etapa de 207,2 km. Tras el Col de Tracol, cuarta categoría y penúltima dificultad montañosa del día, el pelotón comenzó a apretar justo cuando por detrás se reincorporaba a él el líder, el italiano Milan. Sin embargo, los fugados se entendían bien y tiraban como uno solo.

Diversos ataques al llegar a la Côte du Château rompieron a los de delante en dos grupos al principio, que después se reunieron en uno solo de nuevo, perdiendo tres ciclistas por el camino. El vallisoletano del Movistar (21 años y 193 cm de enorme fuerza) sabía que estaba ante una oportunidad maravillosa. Atacó para medir a sus rivales y Lipowitz le devolvió rápido al grupo, pero el ataque había hecho daño y era parte de un plan. ‘La locomotora de Valladolid’, campeón del mundo contrarreloj en categoría sub-23 en 2024, tenía una segunda parte preparada.

Nuevo ataque y por detrás, las dudas. Tejada saltaba, Bernard hacía lo propio, Van der Poel tomaba el mando, Lipowitz iba a la desesperada... pero ya no había solución para ellos. Romeo cruzaba en solitario la meta con doble premio: etapa y líder de la general, con 17 segundos sobre el francés Barre. Su segunda victoria profesional tras una etapa en la Volta a la Comunitat Valenciana. Y es el undécimo español en liderar esta prestigiosa prueba y el 124º en la historia de cualquier nacionalidad.

“No me lo puedo creer. Tomé el riesgo, este tipo de llegadas llanas y en grupo reducido me venía bien. Esta victoria significa todo. 21 años para lograr esto. Es increíble, hace un mes en Sierra Nevada ya pensé en esta victoria. Se lo dedico a mi familia y a mis amigos y al grupo increíble que tengo al lado. Es de ellos. No sé ni qué decir. Ahora, a seguir. Me había costado coger la forma después del inicio de temporada. Quiero agradecer el trabajo de todos mis compañeros, sin el apoyo no hubiera sido posible. También sin mi familia, que ha creído en mí”, decía emocionado Romeo en meta. Y mañana, la contrarreloj, su especialidad.

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