Milan: “No hubiera sobrevivido solo, es gracias al equipo”

La previsión era de nubes y posible lluvia en Valence a la hora de acabar la etapa (pasadas las 17:15) en Valence, y la posibilidad se convirtió en realidad. Como si de fondo sonase la canción Riders on the storm (corredores en la tormenta), del grupo The Doors, empezaron a llegar, de manera salpicada, los protagonistas.

En un primer grupo reducido, el que se jugaría la victoria, no estaba el favorito, Tim Merlier, pero sí el otro gran candidato, el italiano Jonathan Milan. Por lo tanto, sin su gran rival en la pugna, este último lo tuvo todo de cara para lograr su segundo triunfo en este Tour y en su vida en la carrera.

Desde 2019, Italia no lograba una etapa en el Tour, racha que ya rompió el propio Milan en Laval tras la octava etapa. De esperar seis años para que los transalpinos celebraran un éxito a tan solo 11 días para el siguiente. “Estoy muy contento. No tengo muchas más palabras que eso. Después de sobrevivir... No hubiera podido sobrevivir solo, sin la ayuda de mis compañeros. Lo tengo que apreciar mucho. No estaría aquí sin todo su trabajo en las subidas. Con su ayuda todos los días, hemos conseguido estos resultados”, agradeció Milan, que sufrió en la primera de las dos cotas de cuarta categoría del día.

De esta forma, el del Lidl-Trek tiene muy de cara conquistar el maillot verde de la regularidad, ya que suma 312 puntos por los 240 de su gran rival, Tadej Pogacar. Eso sí, el esloveno tiene ahora los Alpes por delante para poder sumar... por lo que Milan deberá hacer un esfuerzo extra para tratar de coger puntos en los esprints intermedios. Después, será imposible.

“El Tour no ha terminado. Aún quedan jornadas muy duras, nos esperan las montañas... pero claro que estoy muy contento por cómo está yendo”, dice el gigante italiano, debutante en el Tour.

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