El equipo de las reconciliaciones: hasta cinco jugadores vivirán una segunda etapa en este club de Primera

El Betis iniciará la Liga con un puñado de caras nuevas, aunque algunas de ellas suenen a conocidas en Heliópolis. Es el club de las reconciliaciones. “Que muchos jugadores quieran volver significa algo”, dejan caer como mensaje desde la dirección deportiva. Y este verano fue muy especial en ese sentido. Volvió Junior Firpo, hizo lo propio Pau López e incluso Álvaro Valles se reencontró con sus orígenes del periodo de juveniles. Una circunstancia que se repitió en años precedentes con futbolisticcwin247.como Lo Celso, Bartra o Bellerín, convertidos ya en referentes. Todos viven una segunda vida verdiblanca.

Manu Fajardo, director deportivo de la entidad bética, no duda en resaltar el deseo de muchos por reencontrarse con su perfil verdiblanco. Junior suspiraba por un regreso tras seis años en los que dudó en el Barcelona y creció en el Leeds. Antes había sido un efecto sorpresa de la mano de Quique Setién para servir de traspaso millonario en Heliópolis. También dejó una suma de dinero notable Pau López, que ahora tratará de repetir su exitoso rendimiento del pasado en el Betis. Ambos llegan a coste cero tras cerrar sus contratos anteriores. Y ninguno de ellos quiso escuchar otros ofrecimientos ajenos al verdiblanco.

Hay más casos de pasado y presente. Un verano atrás, Giovani Lo Celso llegó como fichaje de último suspiro para confirmar que su vuelta era una realidad. Ahora debe ser uno de los líderes de Manuel Pellegrini, sobre todo tras la lesión de Isco. El argentino había brillado con Quique Setién antes de embarcarse a una aventura en el Tottenham que le dejó escasos momentos de esperanza. Pero su fútbol quiere ser el que fue cuando Heliópolis se rindió a sus pies. Marc Bartra es uno de los capitanes de esta plantilla. Líder de vestuario, el catalán regresó al Betis hace dos veranos, superó una campaña casi en blanco por las lesiones y su nivel se elevó hasta ser candidato incluso a la Selección.

Ellos ya sabían lo que el Betis podía ofrecerles. Y pretenden devolver esa confianza con rendimiento de altos vuelos. Bellerín hizo lo propio cuando tuvo que regresar al Arsenal: esperó un curso desde el Camp Nou y volvió para ser el lateral de antes, el que había servido desde la derecha ese centro a Borja Iglesias que valió medio título de la Copa del Rey. También está Álvaro Valles en este proyecto: el meta se pasó un año en blanco por su firme decisión de esperar al Betis, el club del que salió cuando había jugado en Juveniles. Cuestión de fe.

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