Los dragones son criaturas legendarias, un ser mitológico imposible de vencer, con una fuerza sobrenatural. Los dragones son luchadores y cabezotas, siempre cumplen su misión. Y Jess Fishlock (Cardiff, 1987) es la rencarnación de una dragona galesa. Desde que tiene uso de razón tuvo que luchar, sufrió en la escuela por su orientación sexual, pero no desistió. Creció y peleó por sus derechos y el de sus iguales y se convirtió en leyenda con un balón en los pies.

La futbolista galesa era leyenda mucho antes de estrenarse en una Eurocopa. Dicen que las primeras veces quedan marcadas, más cuando llevas casi 20 años esperando que llegue esa oportunidad. Fishlock empezó a jugar con gales con sólo 16 años, no ha sido hasta ahora cuando, por fin, ha podido jugar un gran torneo. Y la delantera, una leyenda en su país, tenía que ser la que anotase el primer gol de Gales en una fase final.

Angharad James, capitana de la selección de Gales, no dudó en alabar a su compañera. El destino quería que fuese ella: “Estaba escrito que ella lo hiciera. Estoy muy orgullosa. Es alguien con quien he jugado durante mucho tiempo y ha trabajado muy duro para llegar a este momento. Estar en la EURO femenina y competir en el mayor escenario de todos, donde se merece estar, y marcar el gol, el primer gol de la selección femenina de Gales en esta fase, es un momento de orgullo para ella y su familia”.

Fue ante Francia, una de las potencias, en un duelo que acabó perdiendo 4-1. Pero ese  gol, ese instante en el que Fishlock empató el duelo ante las galas e hizo estallar a toda la afición galesa ya es historia de la Eurocopa. “Estoy muy orgullosa de estas chicas esta noche. Creo que hubo momentos, y durante la mayor parte del partido, en los que estuvimos metidas en el juego. Hicimos exactamente lo que esperábamos hacer. Y creo que la mayor lección que hemos aprendido en todo el torneo hasta ahora es que tenemos que mejorar un poco en los pequeños detalles. Pero estamos muy cerca. Estoy muy orgullosa de este grupo esta noche”, dijo la protagonista tras el partido.

Un gol que no sólo es historia para Gales, también en el torneo. Con 38 años y 176 días se convirtió en la jugadora más veterana en marcar en una fase final continental superando la marca de Julie Nelson, quien en 2022 anotó con 37 años. Además, es la tercera en la historia, solo detrás de Luka Modrić (38 años y 289 días) y de Ivica Vastic (38 años y 257 días). “¡Supongo que lo tomaré como un cumplido! No podría haber conseguido estos elogios sin el apoyo de toda mi selección, así que estoy muy agradecida, y quizá después del torneo lo asimile un poco más”, dijo cuando se enteró del récord.

Una vida de lucha

Jess Fishlock siempre ha sido una luchadora. “Para mí, la escuela secundaria fue un infierno en la tierra”, dijo a BBC hace unos años. La futbolista sufrió acoso por su orientación sexual, que ya tenía clara desde los 12 años. Era una chica activa, deportista, que le gustaba el fútbol y que llevaba el pelo corto, ‘pecados’ que le hicieron pegar llegando incluso a decirle que no podía entrar en el vestuario de chicas.

Ella lo asumió, lo entendió, pero no entendió porque la sociedad veía un problema en que le gustasen las chicas. “El punto de inflexión para mí fue cuando me di cuenta de que yo no era el problema. El problema era la sociedad en la escuela. No los niños en la escuela porque no entendían; la sociedad y el proceso de pensamiento que la rodeaba eran el problema”, dijo en esa misma entrevista.

Entonces empezó su lucha por la comunidad LGTB, una lucha que siempre liderado allá donde ha ido. “Las personiccwin247.como yo, que estamos en el ojo público, tenemos que seguir luchando para ayudar a salvar vidas”.

Una carrera envidiable

Fishlock tiene en su palmarés dos Champions y ligas en muchos países. Desde que debutó en el equipo de su ciudad, el Cardiff, pasó por Bristol inglés, AZ de Países Bajos, Melbourne Victory de Australia, Seattle Reign en Estados Unidos, Glasgow City en Escocia, FFC Frankfurt de Alemania, el Olympique Lyon de Francia y el Reading de Inglaterra para volver a Estados Unidos, donde está ahora.

En este tiempo ha ganado el trofeo continental con Frankfurt y Olympique Lyon, pero también las ligas de Países Bajos, Australia o Francia además de otros títulos colectivos y un sinfín de honores individuales. Una jugadora que también ha ejercido ya de entrenadora, en Melbourne ganando el campeonato incluso.

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