Por primera vez desde que es entrenadora, Sarina Wiegman perdió un partido en una fase final de la Eurocopa. La preparadora holandesa tenía un récord perfecto de once victorias en once partidos, pero al duodécimo, llegó la derrota. “Por supuesto que estamos frustradas. Tuvimos tres semanas muy buenas, entrenamos muy bien, pero eso nunca garantiza que vayas a ganar el partido”.

La seleccionadora inglesa afrontaba su tercera Eurocopa tras ganar las dos primeras. Con Holanda ganó el título en 2017, su primer gran torneo, terminó con pleno de victorias. Ese éxito le llevó a dirigir a Inglaterra que en 2022 era la anfitriona del torneo continental y lo volvió a ganar, otra vez, con un pleno de victorias. Desde el 16 de julio de 2017 hasta el pasado sábado, Wiegman había ganado todos los encuentros en fase final.

Pero es que además, la técnica nunca había caído en un partido de fase de grupos tras disputar dos Eurocopas y dos Mundiales. En total había encadenado trece partidos sin perder con doce victorias y un empate.

Una derrota del campeón en su estreno en la siguiente edición que nunca había pasado en una Eurocopa femenina en los 38 años de competición.

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