Di María tranquiliza a su afición
El argentino salió del campo lesionado en el minuto 89 en su vuelta a Rosario. Al terminar dijo que solo fue “un pisotón”.
La primera jornada del Clausura en Argentina tuvo un hecho que destacó por encima de todos los demás. Tras 18 temporadas y pasar por Benfica, Real Madrid, Manchester United, PSG, Juventus y otra vez Benfica, Ángel Di María volvía a ponerse la camiseta de Rosario Central.
La expectación por ver al Fideo como titular era máxima, incluso sus comañeros dejaron que saliera solo a calentar para que recibiera el apoyo de los aficionados ‘canallas’. Angelito agradeció el apoyo muy emocionado, con alguna que otra lágrima, y antes de empezar el partido, sus hijas saltaron con él al campo de Gigante de Arroyito, dejando una preciosa estampa familiar.
El último partido que Di María había jugado con el equipo rosarino fue el 16 de julio de 2007 contra Colón hace 18 años. Poco después el extremo fichó por el Benfica y a partir de ahí no dejó de subir, destacando su papel en aquella final de Champions League 2014 donde se llevó el título y el MVP.
Solo su paso por el Manchester United fue decepcionante. Louis Van Gaal fue muy exigente con el argentino, que no pudo desplegar su juego de la manera que le hubiera gustado, y ha dicho en varias ocasiones que es el peor entrenador que ha tenido. Tras ese nefasto año en Inglaterra, se fue a París para convertirse en leyenda.
Siete años en la capital gala, uno en Turín y dos en Lisboa a un nivel magnífico. Pero si hablamos de un gran estado de forma, hay que hablar de Di María con la selección Argentina, con quienes ha marcado gol en las finales de Juegos Olímpicos 2008, Copa América 2021, Finalíssima 2022 y Mundial 2022, consiguiendo todos esos campeonatos para la Albiceleste.
Agridulce regreso de Di María
Ahora, el Fideo esta de vuelta en Argentina. Su debut fue un poco agridulce, marcando desde los once metros el gol que momentáneamente le daba la victoria a Rosario. Pero tras una entrada, se retiró del campo en el minuto 89, y vio desde el banquillo como Godoy Cruz empataba. Al terminar, tranquilizó a sus aficionados: “Un pisotón, nada más”. Además, se mostró feliz por volver a jugar con Central: “Contento, tranquilo, como dije, lo que no me gusta mucho es hablar en la conferencia, esto es mucho más lindo. No perdimos, que es importante, también sumamos”.
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