El Bayern-Auckland fue la imagen de las tremendas diferencias que se van a dar en el Mundial de clubes. Uno de los equipos más potentes de Europa ante un club con jugadores amateurs que apenas pudieron dar la cara ante el gigante alemán. El marcador, un sonrojante 10-0, demostró que este Mundial de clubes también va a mostrar los muchos peldaños de diferencia que hay entre algunos de los participantes.

(Cortesía de Dazn)

El 9-0 fue la viva imagen de la impotencia. A pesar del marcador, Tracey, meta del Auckland, intentó sacar el balón jugado desde atrás a pesar de que el Bayern no paraba en su presión asfixiante. El balón acabó en los pies de Musiala, que anotó el tercero en su cuenta y el noveno de los 10 que acabó encajando el equipo neozelandés.

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