El laberinto de Endrick
La irrupción de Gonzalo compromete al brasileño para la próxima temporada en un papel que parecía reservado para él: el de suplente directo de Mbappé.
Uno fue el héroe de los octavos y las semifinales de Copa. El otro, de los cuartos. Ninguno tenía asignado un papel protagonista, pero tenían los caminos marcados. Uno era secundario; el otro, un meritorio. Y esos caminos ahora se han cruzado. La ausencia de Mbappé en los primeros partidos del Mundial unida a la baja de Endrick ha dado a Gonzalo una oportunidad de oro que el canterano ha aprovechado. Y que ha dejado al brasileño en una posición comprometida. De ser el suplente directo de Mbappé a sentir la amenaza de quedar relegado a recambio del recambio. Y con un dilema en ciernes: quedarse en el Madrid para pelear por minutos o buscarlos lejos del Bernabéu.
En su momento, como ahora ha hecho Gonzalo, Endrick (18 años) tiró la puerta. Dos apariciones en el Bernabéu, dos goles. La primera diana, con la selección de Brasil, todavía con 17 años en un amistoso ante España en la que dejó su carta de presentación ante su futura hinchada. Venía de marcar en Wembley, nada menos. Su debut oficial como madridista lo celebró de la misma manera: gol al Valladolid en el Bernabéu. Un ritual que repitió en su estreno en Champions: también marcó al Stuttgart en la primera jornada de la fase liga.
AS responde
65 millones harán que Gonzalo sea el que salga del Madrid a buscar minutos.....
La cláusula de Gonzalo asciende a 50 millones y, como contamos en AS, tiene tres ofertas de equipos de la Premier.
Pero los minutos fueron llegando a cuentagotas. Su titularidad en Lille, con un Mbappé renqueante, quedó durante meses en una anécdota. La Copa fue su jardín. En el torneo del KO hizo cinco dianas decisivas para llevar al Madrid a la final y a punto estuvo de ser máximo goleador del torneo. En la Copa concentró más del 40% de los minutos que ha disputado. De hecho, jugó diez minutos más en esa competición que en Liga.
La lesión no pudo llegar en peor momento. Cuando empezaba a asomarse por la titularidad y Ancelotti comenzaba a darle minutos. Se rompió en Sevilla, en la penúltima jornada. Lesión del tendón conjunto de los isquiotibiales de su pierna derecha. Dos meses de baja. Adiós a la temporada, adiós al Mundial. Un momento clave con la llegada de Xabi Alonso. Y en el que se abrió una ventana de oportunidad inesperada con la gastroenteritis de Mbappé. Gonzalo no ha fallado: cuatro partidos, tres goles y una asistencia. Una diana cada 98 minutos. El único jugador del torneo que ha participado en un gol, ya sea marcando o asistiendo, en todos los partidos del torneo.
Gonzalo se ha adueñado del papel que le correspondía a Endrick, el de suplente directo de Mbappé. La explosión del canterano pone contra las cuerdas al de Brasilia y compromete los minutos de Endrick en una segunda temporada marcada para seguir creciendo. Y ya ha movido ficha. Aunque no se recuperará a tiempo para participar en el Mundial, ha viajado a Miami para seguir con su recuperación a la vista de Xabi Alonso. La temporada está en juego.
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