El Madrid jugará en Nueva Jersey... pero se queda en Palm Beach
El club prefiere seguir en su campamento, sólo se mudaría para la final. El ‘feeling’ con su actual ubicación y la economía, principales razones.
Home sweet home rocanroleaban los Mötley Crüe. Y ese hogar dulce hogar lo traslada el Madrid a su estancia en este Mundial de Clubes. Aunque todo el trayecto que le quedaría en el torneo desde cuartos hasta la final será al completo en el MetLife Stadium de Nueva Jersey, el club seguirá alojándose y entrenándose como hasta ahora en Palm Beach (Florida). Tanto es así que viajará a Nueva Jersey apenas 24 horas antes del choque contra el Borussia (sábado, 22:00h.). El plan inicial es repetir la fórmula (volver a Palm Beach) si se pasa a semifinales. Sólo los días previos a la hipotética final del día 13 sí los tendría que pasar en Nueva Jersey o la vecina Nueva York, por imperativo de la propia FIFA.
Hay una razón de feeling y otra económica tras esta decisión. El club se siente muy cómodo en la relajada estructura que ha establecido en el Pequeño Valdebebas que se ha levantado ad hoc en el parque The Gardens North District. Aislamiento, carpas para el equipo, directiva e invitados y atención a los medios, un completo gimnasio... El Madrid prefiere hacer las tres horas de ida y las tres de vuelta entre Miami y Nueva Jersey a cambio de lo que gana con este entorno en Florida en el que está en su salsa y que le está funcionando a Xabi. El tolosarra se ha adaptado (no tiene el sistema de cámaras de Valdebebas para analizar los entrenamientos, pero aquí usa un dron para ello) y su equipo también, regulando bien la hidratación, el gran problema en el específico clima caluroso y húmedo de Florida.
Para el club también supone menos gasto. Los desplazamientos en chárter los paga FIFA, pero el alojamiento, las instalaciones de entrenamiento y el sistema de seguridad (incluyendo la escolta policial) corre a cargo de los clubes. Para el Madrid es más sencillo logísticamente mantener y ampliar todo lo que ya tenía contratado. Se valoró de inicio, se reevaluó una vez comenzada la competición y el Madrid se convenció de quedarse en Palm Beach al ver que todo rodaba. Otra cosa es la huella medioambiental de tantos vuelos, una de las críticas que ha recibido FIFA y que hace pupa al máximo organismo del fútbol mundial...
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