Puado, en el limbo
Oficialmente sin equipo, se extrema la cuenta atrás para la continuidad del capitán del Espanyol, entre otros detalles, por el importante surco salarial liberado con la rescisión de Pacheco.
Con la literalidad en la mano, Javi Puado es desde este pasado martes un jugador libre. Vive en una suerte de inframundo de la mitología griega, en un limbo, por primera vez sin equipo desde que aterrizó hace 11 años en la cantera del Espanyol, en cuyo primer equipo ya lleva 211 partidos oficiales y 57 goles. Pero el capitán seguirá vistiendo la próxima temporada de blanquiazul, lo que contará como una renovación a pesar de que se haya excedido formalmente el plazo y, con ello, hayan aparecido suspicacias y cierta intranquilidad en el entorno.
La realidad es que Puado ha renunciado a ofertas de otros equipos de Primera y del extranjero -hasta en Turquía y Arabia Saudí lo han tanteado, tratándose de una jugosa oportunidad de mercado sin traspaso de por medio- porque su prioridad ha sido siempre la de quedarse en el Espanyol. Con lógicas condiciones. La primera se encargó él mismo que se cumpliera, con su gol en la última jornada (y antes, otros 11 en la Liga 2024-25): seguir en la máxima categoría. La segunda la llevan cocinando a fuego lento el club y sus agentes desde hace unos cuantos meses.
Héroe de la permanencia y el ascenso
Pasará Puado a ser el futbolista mejor pagado de la plantilla, acorde a su condición de jugador franquicia, por su brazalete, su capacidad anotadora -además de protagonista de la última permanencia, lo fue indudablemente hace un año del ascenso-, su ascendencia en el vestuario y, no menos importante, porque el Espanyol ha rescindido a quien hasta ahora ostentaba ese honor pecuniario: Fernando Pacheco.
No en vano, el importante pellizco que libera el guardameta, cuya indemnización computará en el ejercicio 2024-25 (por eso se cerró inesperadamente el 30 de junio), libera una sensible masa salarial para la temporada que arranca, lo que unido a la vuelta del club a la regla 1:1 de LaLiga -en virtud de la ampliación de capital recientemente suscrita y la salida de Joan García por 25 millones-, permite holgadamente sellar esta operación.
Además, regresará Puado en los próximos días a Barcelona de sus vacaciones, dado que el lunes 7 inicia el primer equipo del Espanyol su pretemporada, con las revisiones médicas por turnos, de manera que pueda el acuerdo no tan solo anunciarse mediante un vídeo sino plasmarse también a través de un acto con la pompa que corresponde a la continuidad del jugador franquicia y capitán.
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