Rodrygo se sale con la suya
El brasileño recibe al fin un voto de confianza de Xabi y lo hace en la banda izquierda, donde el tolosarra azuzará la competencia con Vinicius.
Xabi Alonso había repetido hasta la saciedad al ser preguntado por Rodrygo que cuenta con el brasileño, que es uno más y que tendrá su cuota de importancia en la temporada. Pero, hasta el duelo de Oviedo, sus hechos no eran coherentes con sus palabras: solo una titularidad, en el debut del tolosarra en el banquillo blanco ante Al Hilal en el Mundial, y cero minutos ante Osasuna en la primera jornada de Liga, siendo superado por Güler, Gonzalo, Mastantuono y Brahim.
Pero en el Tartiere, Xabi cumplió con lo prometido: Vinicius al banquillo y Rodrygo al once inicial. Porque tiene pinta de que va a ser la competencia en esa banda esta temporada, si no hay sorpresas de mercado de última hora. El ex del Santos desea jugar en la izquierda y Xabi Alonso coincide con él en que es desde ese perfil donde puede rendir más. Es un caramelo envenenado, pues peleará los minutos con su amigo, su compañero de selección y un futbolista con enorme facilidad para dejar huella. Se vio en Oviedo: en la media hora que tuvo, marcó un gol y asistió en otro.
Pero Rodrygo acepta el reto y Xabi Alonso va a darle las oportunidades para que demuestre que se merece estar en el once de forma recurrente. La postura del jugador y del club no ha cambiado: él no ha pedido salir y no está en sus planes hacerlo, y el Madrid no le ha puesto en el mercado porque le considera importante en la plantilla. El mercado entra en su recta final y puede aparecer una oferta que fuerce a replantear las cosas, pero de momento Rodrygo apuesta por el Madrid y por recuperar su mejor versión desde la izquierda.
AS responde
La competencia es buenísima para que estén todos enchufados....
Hola, David. En eso precisamente está Xabi Alonso y elevar la competencia sana entre los jugadores. Tiene plantilla y posiciones dobladas para hacerlo con la frecuencia que quiera.
“Rodrygo es uno más”
Al ser sustituido en el minuto 63 para que entrase Vinicius, Rodrygo mostró un cierto enfado y no lo disimuló. Probablemente, fruto de ver que había podido dejar huella en el marcador y no lo había logrado. La hora que disputó fue la más complicada para los atacantes del Madrid, con un Oviedo con tres centrales y apiñado en su campo propio, sin apenas espacios. Le costó al brasileño profundizar, aunque lo intentó bastante y suya fue la primera gran ocasión del Madrid, un tiro que se envenenó tras tocar en un rival y que sacó Escandell por poco. Luego volvió a intentarlo: desborde por fuera y chut con la izquierda despejado hacia el corazón del área, donde Güler casi aprovecha el rechace.
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Sus números, sin ser galácticos, fueron los de un atacante con mucha presencia: cuatro remates, dos a puerta, 30 pases completados en campo rival, tres centros al área, 68 intervenciones, mucha seguridad con balón (96% de pases buenos) y mucho trabajo sin él, con cinco recuperaciones. Pero el premio del gol le fue esquivo y se le notó en el banquillo, dejando de lado que lo de Oviedo fue un paso adelante para él. Hay competencia en la izquierda, donde Rodrygo quería jugar, y Xabi Alonso alimentará esa pelea en su beneficio: “Ha hecho un buen partido. En ese lado se asocia bien. Ha tenido algún tiro. Me ha gustado. Necesitamos a todos y Rodrygo es uno más". El sábado, ante el Mallorca en el Bernabéu, siguiente asalto.
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