Cazorla no se entrena en el primer entrenamiento pero el plan es que llegue a tiempo al choque del sábado

El primer entrenamiento del Real Oviedo tras la derrota en Anduva se centró solo en los jugadores con menos minutos en la ida de la final por el ascenso. Los titulares hicieron trabajo en el gimnasio y solo algunos se dejaron ver por el césped de la ciudad deportiva, aunque sin trabajar junto al resto de compañeros en una sesión dirigida por Paunovic y orientada a las finalizaciones ante la meta rival.

Santi Cazorla fue otro de los ausentes, como ya sucedió en el choque de Anduva. El internacional arrastra unas molestias de la cita ante el Almería, en la que fue el héroe, y Paunovic esperó hasta última hora para saber si podía participar o no en el choque de ida. Finalmente, se optó por reservarle para la vuelta.

En el primer entrenamiento no salió al césped, pero forma parte del plan ideado por los servicios médicos y los entrenadores para que llegue en las mejores condiciones posibles al enfrentamiento del sábado ante el Mirandés, en el que se espera un lleno absoluto en el Tartiere.