Dejen salir antes de entrar
El Granada necesita saber qué jugadores no continuarán para acometer más fichajes. Hongla, Gumbau o Boyé están en la rampa de salida y con sueldos altos.


La plantilla del Granada aún no está cerrada, ni mucho menos. Sin embargo, es complicado acometer más fichajes sin conocer las salidas que va a haber. Dejen salir antes de entrar. No sólo por conocer las posiciones con más necesidades, sino también para saber hasta dónde pueden llegar con las ofertas económicas a jugadores.
Con el fair play financiero sobrevolando, para acometer una nueva llegada y más de jugadores con cierto nombre, como puede ser el caso de Álvaro Aguado, aún tendrán que salir antes futbolistas con sueldos altos. Y son varios los que tienen papeletas para decir adiós antes de que arranque la temporada.
Como adelantamos en Diario As, uno de los que podría decir adiós es Lucas Boyé. El punta es uno de los futbolistas con mejor cartel del equipo y, aunque ha sido el líder esta temporada, el club no vería con malos ojos su salida, siempre y cuando se alcancen los diez millones que tiene en la cláusula de rescisión. Además de la importante inyección económica y de amortización también se iría uno de los sueldos importantes.
Un caso similar al de Martín Hongla, que por tercer mercado consecutivo quiere salir. El camerunés es otro de los jugadores valorados de la plantilla y también de los que tienen un sueldo más alto, además que en la temporada y media que aha estado en Granada no ha reniddo al nivel que se esperaba de él. El Aris de Salónica ya ha preguntado por él, pero como en el caso de Boyé, tampoco se va a mal vender un futbolista top para la categoría.
Similar situación a la de Gumbau que le queda un día para buscar un destino y, sino, el Granada podría traspasarlo. El jugado tiene una cláusula en la que se puede ir a otro equipo cedido si este paga el sueldo. El pasado curso en el último día que tenía para comunicarlo decidió fichar por el Rayo Vallecano. El día 15 de julio se termina el plazo y a partir de ahí será jugador de Pacheta en todos los sentidos.
A estos hay que sumar a Weissman. A pesar de que el israelí fue importante con Pacheta en Valladolid, parece que en esta segunda etapa no está convenciendo al técnico, que ya en sus tres primeros partidos no le dio confianza. El hebreo además es otro de los sueldos altos de la plantilla y son ya varias temporadas intentando buscarle un acomodo. Igual que a s a su edad y la irrupción de Manu Lama hacen que su salida sea una opción factible, ya que también es otro de los sueldos importantes.
Con estas salidas, el Granada tendría liquidez para acometer nuevos fichaje más importantes o de jugadores con más caché que los que hasta ahora han llegado a la plantilla. Ninguna de las cinco caras nuevas tiene experiencia en la categoría de plata en España y son jóvenes y con hambre, dos de los requisitos que quería el técnico.
Lo que tiene claro el preparador es que hay jugadores intocables. Lama, Williams, Sergio Ruiz, Trigueros, Stoichkov o Pablo Sáenz serán la columna vertebral del nuevo Granada a falta de aún unas cuantas caras nuevas más. Pero para que lleguen, primero hay que hacer sitio en la plantilla y, sobre todo, en la masa salarial.
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