El Consejo de Administración del Tenerife es un polvorín

El Tenerife sigue sin tener paz. Al descenso a Primera RFEF se le suma la crisis institucional, donde su Consejo de Administración es un polvorín y cada reunión evidencia la grieta que hay entre sus componentes. Así será muy difícil que el club regrese lo antes posible al fútbol profesional.

Una de las gotas que colmó el vaso fue lo sucedido en la tarde de este lunes, donde se produjo un encuentro entre los consejeros para determinar fecha para una nueva Asamblea Extraordinaria -todo indica que sería los primeros días de julio-. Sin embargo, el discurrir de los acontecimientos, cambió.

Según han informado varios medios, el grupo que tiene mayoría en el Consejo (Rayco García, Ayoze García, Felipe Miñambres y Antonio Porro), solicitaron el cese de José Daniel Díaz, presidente del club, por pérdida de confianza. Antes de tomar cualquier decisión, el máximo mandatario se levantó y se marchó de la sala en la que se encontraban deliberando.

Lo cierto es que el presidente apenas tiene peso en las decisiones. Algo similar sucedió con su antecesor Paulino Rivero. En los tres meses que lleva en el cargo, el grupo dominante del Consejo se ha ido distanciando cada vez más de Díaz. El ejemplo más claro ha sido el próximo acuerdo con el UD Tenerife Costa Adeje para unir sus equipos femeninos y el uso compartido del Heliodoro.

No es el mejor panorama para un club que acaba de abandonar la Segunda División y que tiene la difícil misión de re-ilusionar a sus aficionados confeccionando un equipo prácticamente desde cero para competir en Primera RFEF. La fe de los seguidores del Tenerife está en manos de Álvaro Cervera, quien seguirá capitaneando el barco.

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