Los malabares de Pacheta
El primer test no fue del todo bien, aunque el técnico tuvo que improvisar con canteranos. Faltan fichajes y rodaje. Tras el partido, habló de sus sensaciones.
El Granada no sacó buena nota en el primer test de la pretemporada. Los nazaríes cayeron y dejaron dudas. Falta rodaje, cierto, pero también efectivos en puestos clave y más mecanismos de juego. Pacheta lo sabe y, contra un Orlando Pirates mucho más hecho, tuvo que hacer malabares para no dar minutos de más a nadie.
Y aunque el resultado no es lo más importante en este tipo de encuentros, Pacheta lo dejó claro al término del duelo: “No me gusta perder nunca”. Sin embargo, también sacó la lectura positiva del varapalo en el primer partido: “Esto son partidos que nos enseñan mucho y nos van a enseñar mucho de los que somos y de lo que no”.
“Cada partido es importante, las derrotas enseñan, las victorias son un poco mentirosas”, señalaba el técnico que hizo debutar a cinco de sus seis caras nuevas. El preparador explicó por qué una derrota como esta tiene que servir de cara al futuro: “La cornada te duele y te hace crecer, admiro la gente que crece solo en las victorias, generalmente aprendemos más en las malas”.
Y reconoció que hubo cosas que no le gustaron… y también que sí: “Aunque he visto cosas muy buenas, ese es el camino que tenemos que seguir y las malas tratar de arreglarlas”. El preparador utilizó 22 jugadores, sin Weissman, que llegó más tarde a los entrenamietos, Sergio Ruiz, con molestias, y el recién llegado José Arnáiz. Además, alineó a los canteranos Juárez, Gael Joel, Samu Cortés, Heredia, Pere Haro y Obi. Seis del filial para completar, además de los dos que estarán con los mayores Oscar y Rodelas.
De hecho, en su primer once apostó por los dos nuevos (y únicos) laterales que tiene en el primer equipo: Casadesús y Diallo. Con ellos Oscar, de central, e Insua, que su futuro no está asegurado de rojiblanco. Por delante otro en el aire, Martín Hongla, con el recién llegado Alemañ. Rodelas y Pablo Sáenz, dos fijos ocuparon las bandas con Stoichkov y el canterano Juárez en punta.
En la segunda mitad, llegaron los goles sudáfricanos con un nuevo once sobre el campo en el que había cinco canteranos. Gael se tuvo que adaptar al lateral derecho (es extremo) y por ahí llegaron los dos goles. Mientras, Obi hizo de mediocentro junto a Trigueros y Samu Cortés y Heredia estaban en el póquer de arriba. Malabares para dar 45 minutos a todos los jugadores disponibles.
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Trigueros, en ese sentido, siguió la línea del técnico explicando que esto no ha hecho más que empezar: “Hemos perdido, pero al final nos sirve para seguir trabajando y continuando con la pretemporada. Venimos de una primera semana de entrenamientos y este partido es un entrenamiento más para ponernos a punto ante un rival que venía más rodado. Sirve para seguir mejorando y perfeccionando lo que quiere el míster con las nuevas piezas que van llegando”.
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