El milagro se acerca: Carolina Marín vuelve a coger la raqueta

Es un camino largo, ella lo saber mejor que nadie, pero se empieza a vislumbrar el final. Este martes, Carolina Marín compartió un vídeo en sus redes sociales entrenando raqueta en mano. Un antes y un después en su recuperación. Desde que la onubense se lesionara de gravedad (ligamento cruzado y meniscos de su rodilla derecha) en los Juegos de París, hace ocho meses, no había vuelto a golpear un volante. Sólo lo iba a hacer cuando se sintiera realmente preparada para ello. “No quiero agobiarme ni obsesionarme con el bádminton. Con las dos lesiones anteriores, también he pasado lo mío. Si cojo una raqueta, será para disfrutar”, decía en una visita a este periódico a finales del año pasado. Llegó el momento. La campeona olímpica está más cerca de volver. Otra vez.

Después de vivir un nuevo infierno, las buenas noticias se acumulan. Las imágenes de Carolina con una raqueta en la mano llegan 10 días después de que se anunciara Huelva como sede de los Europeos de 2026. Era un deseo de la propia Marín y se cumplió. “Hay una posibilidad en 2026. Sé que España va a acoger un Campeonato de Europa en 2026, aunque aún no se sabe dónde, y me encantaría que Huelva pudiese acogerlo para poder retirarme en mi casa. Ese es ahora mismo el gran sueño y quiero luchar por ello”, decía en septiembre. “Una noticia que me alegra el corazón y me da más fuerza para mirar al futuro”, compartió en sus redes sociales tras conocerse la noticia. Y ya mira al futuro con más fuerza.

En París, Carolina sufrió su tercera lesión grave de rodilla (ligamento cruzado de la derecha en 2019 y ligamento y meniscos de la izquierda a dos meses de los Juegos de Tokio, en los que no pudo estar). El drama, cuando la jugadora española ya acariciaba la final olímpica, se apoderó del Arena Porte de La Chappele el 4 de agosto. Tres días después, era operada con éxito. Una semana después, se abría en canal para sus seguidores. “No sé qué va a ser de Carolina Marín en un futuro. No sé si volveré a jugar. No sé si volveré a coger una raqueta de bádminton o si volveré a unos Juegos Olímpicos. Ahora mismo, es en lo que menos pienso”, compartía a través de un vídeo.

Ahora, se han despejado muchas incógnitas. Carolina ha vuelto a coger una raqueta de bádminton y, aunque se desconoce una posible fecha de regreso a las pistas, ya tiene un objetivo en la mente, esos Europeos en casa que pueden significar su adiós. Hasta el momento, la onubense se había centrado en su recuperación física, con muchas horas de rehabilitación y trabajo físico. Desde el principio, y pese a ser, posiblemente, la peor de sus tres grandes lesiones, acortó plazos, como ha sido habitual a lo largo de su carrera. Se desprendió de las muletas un mes antes de lo previsto y, en octubre, ya se estaba machacando en el gimnasio. Desde principios de año, sus ejercicios ya se habían trasladado a las pistas, pero aún sin volantes de por medio, centrada en la movilidad. A partir de ahora, la raqueta volverá a estar presente. Y el regreso, más cerca.

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