Boxeo | Indiscutido superpluma

Taylor vuelve a dominar a Serrano y Miranda se deja el indiscutido en el Madison

La española mostró su mejor versión ante Alycia Baumgardner, que retuvo su título indiscutido del peso superpluma por decisión unánime (96-94, 98-92 y 97-93) en Nueva York.

Alycia Baumgardner y Jennifer Miranda durante el combate en Nueva York.
SARAH YENESEL
Cristina Parra
Nació en Martorell en 1999. Grado en Periodismo en la Universidad Autónoma de Barcelona. Desde pequeña, tenía claro que quería ser periodista y hablar del Atlético de Madrid, hasta que descubrió el boxeo y las MMA. Entró en AS en 2022 y fue la enviada especial a Anaheim, California, para cubrir la disputa por el título del peso pluma de Topuria.
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Jennifer Miranda (12-1-0, 1 KO) ya hizo historia al ser la primera boxeadora española en pelear por un título indiscutido y en subir al ring central del Madison Square Garden de Nueva York. No pudo continuar escribiéndola, pero, sin duda, mostró su mejor versión en el cuadrilátero y dio guerra hasta el final. Cayó por una inflada decisión unánime (96-94, 98-92 y 97-93) ante Alycia Baumgardner (16-1-0, 7 KO), que retuvo sus cuatro cinturones del peso superpluma en la velada íntegramente femenina organizada por MVP, la promotora de Jake Paul, que encabezó la trilogía de Amanda Serrano (47-3-1, 31 KO) y Katie Taylor (24-1-0, 6 KO), que ganó la irlandesa, y batió el récord con 17 cinturones en juego.

Ambas salieron tanteándose y estudiándose. La española mantenía la larga distancia, manteniéndose alejada de las manos de la campeona. La tensión se sentía en el ambiente. Con el jab de izquierda marcaba y Alycia empezó a lanzar los primeros golpes. La estadounidense conectó una buena combinación y llevó a Miranda contra las cuerdas, haciéndola caer de un empujón del que se pudo reponer. Los intercambios iban subiendo la intensidad. “Está muy bien”, le decía su entrenador Javi Pardo en la esquina, tras ver el impulso con el que salía su boxeadora. En el tercer asalto, Baumgardner salió con mucha fuerza, intentando acortar la distancia. Llegaba con el jab de izquierda la gaditana, manteniéndose en el lugar que era más cómodo para ella.

Este round lo hemos ganado con esta agresividad. Podemos hacerlo”, la alentó Javi entre asaltos. Alycia aumentó el volumen de sus golpes, y pilló a la española, que tuvo que agarrarse. La campeona siguió llevando el pleito a la corta distancia, poniendo en dificultades a Jenni, llegando con las manos más acertadas. Miranda celebraba los buenos rounds, con un gran trabajo, conectando a Baumgardner, que fue aumentando el nivel con el paso de los asaltos. Ambas lo celebraron cuando sonó la campana final.

El trabajo de Miranda fue excepcional, sobre todo en los primeros asaltos, cuando Jenni, que terminó con el ojo derecho inflamado, salió con todo. Asaltos igualados y una pelea cerrada. Una actuación de la española, fuera de casa y con una rival de alto nivel. “Es una boxeadora inteligente, tenía un buen plan”, reconoció Alycia, que no hizo ni de lejos su mejor combate, cuando volvió a ponerse sus cinturones. La gaditana se bajó del ring habiendo dado su mejor cara y demostrando que en España hay grandes boxeadoras que están al nivel de los combates más importantes.

Taylor, reina de la trilogía

Katie Taylor volvió a salir con la mano en alto tras un combate con Amanda Serrano. Ya es el tercero. La irlandesa se impuso por decisión mayoritaria (95-95, 97-93 y 97-93) en la trilogía con la boricua, la rivalidad más importante del boxeo femenina y que más ha marcado la historia de este deporte. Retuvo su título indiscutido del peso superligero en un combate en el que fue más técnica, ante una oponente que no dio lo máximo.

Serrano salió con la cantante dominicana Natti Natasha, luciendo su barriga de embarazada, al ritmo de su canción Criminal, y hombro con hombro con Jake Paul, que fue el encargado de impulsar su carrera y darle su lugar al boxeo femenino. El pleito empezó muy igualado desde el primer asalto, y fueron aumentando la intensidad minuto a minuto. Serrano empezó a recortar distancias, llevando la iniciativa, mientras que la irlandesa boxeaba hacia atrás. Taylor empezó a lanzar sus ráfagas de manos y se mantenía en movimiento ante la aguerrida boricua, que lanzaba un gran volumen de manos, intentando frenarla. El choque fue mucho menos intenso que los dos anteriores, y, aun así, fue una guerra que volvió a decantarse para Katie. “Muchas gracias a todos los que habéis venido a apoyar el boxeo femenino”, dijo entre lágrimas la boricua.

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