Series
Crítica de la temporada 2 de ‘The Last of Us’. Tan buena como el videojuego
La serie de HBO madura a los personajes y los pone al límite en un viaje que no ha hecho más que empezar.

Una mentira piadosa puede decirse con la mejor intención del mundo, pero no deja de ser una mentira, con todo lo que ello conlleva. Y cuando se descubre, las consecuencias pueden ser catastróficas. Joel prometió a Ellie que su versión de los hechos se atenía a la realidad, aunque lo que ocurrió no tenía nada que ver con lo que le contó. Lo sucedido en el hospital de las Luciérnagas los persigue y sus consecuencias articulan la trama de la segunda temporada de ‘The Last of Us’, la esperada serie de HBO. Neil Druckmann, director del videojuego y cocreador de la serie, dijo que esta historia era una versión diferente. Y sí, diverge en algunos puntos, pero el corazón es exactamente el mismo.
Han pasado varios años desde aquel incidente. Ellie y Joel viven en la comunidad de Jackson, duermen bajo un techo y disfrutan de una vida con reminiscencias al antiguo mundo. Patrulla aquí, patrulla allá, la joven ha tenido sus diferencias con Joel, que la sobreprotege como si fuera su padre. Detrás de todo esto subyace la culpa, las verdades no verbalizadas y las sospechas sin confirmar, lo que provoca un distanciamiento entre los dos. Bella Ramsey y Pedro Pascal son Ellie y Joel, se mimetizan con sus personajes de tal manera que son capaces de transmitir sus turbulentos y a menudo contradictorios sentimientos al espectador. Es ese hecho del pasado lo que desencadena lo que está por llegar, una narración descarnada, violenta y vengativa.
- Te puede interesar: El cocreador de ‘The Last of Us’ compara la segunda temporada con ‘Star Wars’
Una cuestión de perspectivas
Un mismo acontecimiento puede tener distintas perspectivas. Joel hizo lo que hizo porque creía que era lo correcto, pero Abby (Kaitlyn Dever) no piensa igual. Lo busca con un objetivo muy concreto y su respuesta hurga en la herida del odio. En líneas generales, el personaje es parecido al de los videojuegos, no tanto en su aspecto físico —comparte peinado, pero no cuerpo musculado—, pero sí en su personalidad y objetivos. De todas formas, el enfoque de esta temporada se focaliza en Ellie, sus sentimientos en torno a Joel y su enamoramiento y relación con Dina (Isabela Merced). Nos ha faltado un poco más de Abby, pero es entendible que su momento llegará en otras temporadas.
Ellie es un personaje más maduro, Joel está más roto que nunca y la historia se oscurece a medida que los episodios avanzan. Tras un acontecimiento trágico y definitorio—que no desvelaremos para no arruinar la sorpresa a los que no han jugado al videojuego—, el viaje de Ellie y Dina a Seattle mezcla momentos íntimos y emocionantes con encuentros hostiles de vida y muerte. Las escenas de acción y terror brillan gracias a la estupenda ambientación y al diseño de producción, que captura el tono del videojuego. Los instantes de tensión dejan al espectador sin respiración, aun cuando muchos saben que la protagonista sobrevivirá a los mordiscos de los infectados. De todos modos, los monstruos no son los únicas criaturas a temer: los humanos, capaces de lo mejor y de lo peor, demuestran ser tan peligrosos como los chasqueadores.

Nos ha gustado el papel de Catherine O’Hara, inédito con respecto a los videojuegos, porque es la psicóloga que atiende a Joel, pero al mismo tiempo, ella se enfrenta a sus propios desequilibros y a sus sentimientos contra Joel.
La serie se detiene a construir cuando tiene que hacerlo. De la misma manera que el episodio de Bill y Frank en la primera temporada, Craig Mazin y Neil Druckmann exploran la relación entre Ellie y Joel cuando la situación lo requiere. Emoción a flor de piel, tensión, contradicciones y mucho sentimiento —también represión emocional—. Así es la segunda temporada de ‘The Last of Us’, que se acaba justo cuando más queremos que siga. Sus siete episodios nos dejan con ganas de mucho más. Además, existen algunos problemas de ritmo, pese a que la estructura narrativa funcione.

¡Síguenos en ambas y, si estás interesado en licenciar este contenido, pincha !