Golpe dramático para el líder
Rowland abandona tras un accidente y ve como Wehrlein acaba segundo por detrás de Evans y se le acerca a 50 puntos. El de Nissan todavía puede ser campeón en Alemania.


Había que hacer cálculos al llegar al E-Prix de Berlín porque la Fórmula E podía tener a su campeón de la temporada allí. Y decimos ‘podía’ porque ahora más difícil de lo esperado después del cero con el que acabó Rowland el sábado. El líder se vio envuelto en un accidente, tuvo que abandonar y ver como Wehrlein, su rival más cercano, cruzaba la meta segundo por detrás de un victorioso Evans. La distancia entre ambos se reduce a 50 puntos y Rowland necesita un mínimo de 58 para llegar campeón a Londres.
La lluvia afectó a todas las sesiones previas del E-Prix (no hubo Libres 2 ni duelos en la clasificación) y con el asfalto mojado se dio la salida a la primera carrera en Alemania (con Pit Boost), aunque hubo que neutralizarla nada más arrancar porque el Andretti de Dennis no lo hizo al apagarse el semáforo. Pudo poco después y, nada más retirarse el Safety Car, el poleman Evans utilizaba ya su primer Modo Ataque como Da Costa o Wehrlein, los Porsche que se tocaron en los Libres 1 con sanción de tres puestos al alemán (empezó 9º).
Quizá por la amenaza del cielo, se abrió muy pronto la veda de los ataques en el grupo delantero y Rowland, que lo activó cuatro vueltas más tarde que sus principales rivales, pasó del tercero en parrilla al sexto una vez se estabilizó la carrera. Mientras, Wehrlein, muy combativo, y Da Costa iban a la caza de Evans hasta que en la vuelta 19 se abrió otra ventana, la de las paradas en boxes, con el DS de Günther a la vez que Vergne, su compañero, gastaba su último Modo Ataque. Estrategias diferentes.
No como las de Evans y Wehrlein, que cumplieron con su Pit Boost en la vuelta 26 y una más tarde lo hacía Rowland después de tener un roce con Mortara. Al de Nissan le pillaba lejos esa lucha por la victoria con los DS, Frijns y Da Costa entre medias. Así iban cuando Camara se llevó puesto a Beckmann en una maniobra incomprensible (le cayeron diez segundos), trajo de vuelta al coche de seguridad y dejó un esprint final frenético con la baja de Vergne (por problemas)… y ¡de Rowland!
Todos gastaban su último Modo Ataque y, cuando lo hizo el británico, cayó muy atrás, le golpearon por detrás y él también lo hizo a Vandoorne. Un vuelco al campeonato que puede llegar vivo a Londres. Con el líder del Mundial fuera, Wehrlein fue a por todas a por Evans. El Porsche se pegó al Jaguar en las dos últimas vueltas con idéntica energía en el tanque, pero no hubo posibilidad de adelantamiento y cruzaron así la meta por delante de Mortara (tras sanción por golpe a Hughes). Un segundo que sabe a oro para el alemán.
Resultados del E-Prix de Berlín 1

Así va el Mundial de Fórmula E

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