Márquez, encantado con los triunfos de Alonso y Quiles
“Mola cuando ves a un David Alonso o a un Máximo Quiles con el punto de inconsciencia de un ‘rookie”, dice Marc.
Vive en su hype, que dicen los modernos, en la cresta de la ola, que diría un clásico, y aún así Marc Márquez no se olvida de lo que viene por detrás. Tras su triunfo en la carrera de Hungría, el del 23 de 28 posibles, el del séptimo doblete consecutivo, el del décimo en total, el que le da una ventaja de 175 puntazos, AS le dijo que habíamos titulado la crónica de la carrera con ‘El Márquez que conocemos y el Acosta que queremos’, para saber qué cree que haría Acosta con una moto como la suya. Y él habló de Acosta y de lo que viene por detrás, de David Alonso, con el que se lleva muy bien, y de Máximo Quiles, al que representa y tutela.
“No se sabe. No se sabe, pero seguramente si lo continúa haciendo como lo está haciendo, de aquí a año y medio tendrá la oportunidad de ir a la marca que él quiera, entonces tiene un futuro por delante, lo ha demostrado, tiene mucho talento, pero como se ve, hay un Martín, hay un Bezzecchi y también hay un Acosta, un Aldeguer y toda esta nueva generación es la que sube y marcará el futuro. Sin olvidarnos de los pequeños, que hoy también ha sido la primera victoria de David Alonso, la segunda de Máximo Quiles, así que tenemos cantera en España, que es lo verdaderamente importante”.
Le dijimos que sabíamos que David le había pedido algún consejo para esta pista, casi enganchándose a su cuello, y se lo dio: “Bueno, le dí consejos en la clasificación que no le salieron muy bien, así que hoy (por el domingo) no le he dicho nada... Fue un ‘menos es más’, cierto, pero muchas veces normalmente, como me pasó a mí en Austria, que yo hablé de más y fue menos, y sí, menos es más. Y este fin de semana Máximo iba volando, así que no le hacía falta ningún consejo”.
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Le encantó la remontada del Colombiano de Madrid: “Me ha recordado un poco a mi primera victoria de Moto2 en Le Mans, que venía desde atrás, remontando y atacando, y eso es lo bonito. Mola cuando ves a un David Alonso o a un Máximo Quiles con el punto de inconsciencia de un ‘rookie’, que hacía unas frenadas que alguna entraba porque sí y que en Austria le salió mal (a Quiles), pero aquí le ha salido muy bien. Les felicito a los dos”.
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