Opinión

Con las remontadas se utiliza el verbo ‘creer’

En el Real Madrid, las remontadas son un sistema de creencias tan poderoso como una religión.

Joselu celebra un gol con el Real Madrid en Champions.
JESUS ALVAREZ ORIHUELA
Lucía Taboada
Actualizado a

En la previa del Getafe-Las Palmas se le preguntó a Bordalás por las probabilidades de una remontada del Real Madrid en Champions. Bordalás puso cara de circunstancia durante unos segundos, tragó saliva y decidió ser políticamente correcto alabando a Ancelotti, con quien mantiene una muy buena relación. Ocurre estos días que, si vas a la panadería y pides una barra de pan para llevar, el panadero te responde que si la quieres integral y si crees en la remontada. Desde el pasado martes, todo gira en torno a la posible remontada madridista en Champions, incluso la previa de un Getafe-Las Palmas de Liga.

En Francia, la palabra “remontada” entró en el diccionario francés ‘Larousse’ a raíz de la popularización que obtuvo tras el 6-1 del Barça al PSG, aquel día en el que Verratti lloró desconsolado sobre el césped del Camp Nou sin creer lo que acababa de ocurrir en el campo. Resulta curioso y casi reprochable que así se popularizase el término porque la patente en remontadas la tiene el Real Madrid, específicamente en Champions donde se reproduce constantemente el meme de “Llama a una ambulancia, pero no para mí”. Este meme nace de un anuncio de autodefensa para mayores en Las Vegas en el que se ve a un anciano siendo asaltado por un hombre con cuchillo. El anciano, encogido y con una mano en el pecho (parece herido) exclama: “¡Llama a una ambulancia!”; para, a continuación, erguirse, sacar una pistola, apuntar al atacante y afirmar: “¡Pero no para mí!”.

Noticias relacionadas

Con las remontadas se utiliza el verbo “creer”, y no el verbo “pensar”, “conseguir” o “aspirar”, porque la cosa va precisamente de eso, de creer. En el Real Madrid, las remontadas han conformado un sistema de creencias tan poderoso como una religión, con el Bernabéu como iglesia, y con jugadores como Rüdiger como profetas. Así que el discurso se está centrando en eso: en la fe, en la creencia en la gesta, en el espíritu incandescente de la remontada, una vez más, una noche más. Pero a partir del miércoles, con o sin remontada, quizá convenga centrarse en el gran olvidado estos últimos días (si no semanas): el fútbol.

¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de . ¿Buscas licenciar contenido? Haz clic

Etiquetado en:

Comentarios
Normas

Rellene su nombre y apellidos para comentar

Te recomendamos en Opinión

Productos recomendados