No creo que fuera una sorpresa para nadie el estado físico y no sé si mental de los futbolistas del Real Madrid en el partido contra el Al Hilal. La temporada ha sido muy larga, con demasiados partidos que han hecho mella en las piernas y en la cabeza de los jugadores. Xabi Alonso comienza una nueva etapa en este final de temporada agónico, con una plantilla que no será la que inicie la próxima. Habrá bajas entre los que están en el Mundial y altas de futbolistas que hoy no están en el equipo.

Del primer partido, me quedo con Huijsen, que además de su buen trabajo en defensa, tiene calidad en salida con balón. Acaba de debutar y conviene no echar las campanas al vuelo, porque queda mucho camino por recorrer con el mejor equipo del mundo, pero también el más exigente. Gonzalo también aporta alternativas de las que carece la plantilla, delanteros con posibilidad de terminar jugadas, rematando de cabeza. No tiene la estatura de Haaland, Sorloth o Joselu, pero en este momento es el único de los de arriba que permite centros por alto al área. También la presencia de Gonzalo como delantero centro abre la posibilidad de alinear a Mbappé por la izquierda, en el puesto donde más ha jugado y destacado. El cansancio acumulado por los futbolistas se comprueba no en el juego de Vinicius y Rodrygo, que sigue siendo pobre, sino viendo el bajo rendimiento de futbolistas en los que el poderío físico es una de sus características, como Valverde o Bellingham. Jugar con altas temperaturas a las tres de la tarde tampoco ayuda a correr durante muchos minutos. Ojalá la ilusión por ganar este torneo les pueda dar algo de energía antes de sus necesarias vacaciones. Este primer Mundial, que acaba de empezar, ya ha dejado algunos titulares, entre otros la goleada 10-0 del Bayern al Auckland, el empate del Monterrey contra el subcampeón de Europa, con otro gol de cabeza de Sergio Ramos, la victoria del equipo de Messi al Oporto o la derrota del campeón de la Champions frente al campeón de la Libertadores, lo que durante muchos años fue la Intercontinental.

Ayer no fue un buen día para los que somos bercianos; la Ponferradina no pudo ascender a la categoría de plata de nuestro fútbol. ¡Ánimo Deportiva! Pero sigue valiendo lo que dijo Piqué: “Un fin de semana en Ponferrada, mola”.

Noticias relacionadas

Opinión

Champions

Pasaba por aquí | Manuel Cobo

Cantando bajo la lluvia

¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de .

¿Buscas licenciar contenido? Haz clic