España defiende su historia

España inicia este jueves la defensa de su título en el Eurobasket en un estreno envenenado ante Georgia. Lo hace envuelto en una madeja de dudas, después de una tortuosa preparación, condicionada por las lesiones, que terminó con un balance de una victoria y cinco derrotas. A pesar del resultado, Sergio Scariolo dijo tras el último partido: “No estamos mal…”. Y con ese espíritu comienza su andadura. Hay veces que Scariolo sabe cosas que el resto de humanos desconocemos. Confiemos en ello. Algo tiene que palparse dentro del grupo cuando el nuevo líder del equipo y único NBA español, Santi Aldama, asegura que solo terminará contento con “el oro”. Palabras mayores. Y ambiciosas.

Pero seamos sinceros. Esta Selección de 2025, en plena transición tras cerrar su Edad de Oro, no parte entre las candidatas al título europeo. Ni de lejos. La propia FIBA, en su último Power Ranking, supuestamente confeccionado con datos objetivos, coloca a España como décima favorita. Estamos como estamos. No hay que ofenderse por ello. Cuando nos señalaban con el número uno, también lo aceptábamos. Al revés, el pronóstico debe tomarse como un revulsivo. Porque la fuerza de esta Selección no está en las individualidades, sino en el grupo. Y también en su palmarés. España lleva siete ediciones consecutivas subiendo al podio, cuatro de ellas con el oro, las cuatro con el mago Sergio, y no ha bajado nunca de las semifinales en las últimas once. De hecho, el cuarto puesto de 2005 es la única vez en ese periodo en el que no se mordió chapa. Es el mejor equipo de Europa del Siglo XXI. Con gran diferencia. No se puede vivir del pasado, eso es verdad. Pero el pasado también obliga. Mientras se construye el futuro, que lo hay, España defenderá su corona, su historia y su orgullo. Hasta la última bocina.

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