Pasar un buen rato
Varios integrantes de Suecia habían jugado en Sabadell dos años antes un partido de los Juegos.
En 1992 se jugaron seis partidos del torneo de fútbol de los Juegos Olímpicos en mi ciudad, Sabadell, y en el estadio en el que más goles he gritado en mi vida, la Nova Creu Alta. Yo tenía nueve años y el fútbol internacional ya me gustaba. Me encantaba descubrir jugadores con nombres raros que habitualmente no aparecían en los periódicos. Y sin embargo, no fui a ver ningún partido de aquellos Juegos. Creo que mi padre me dijo que era un torneo de jóvenes y que el fútbol no era importante en el contexto olímpico: supongo que fue su manera de intentar que me doliera menos perderme aquellos encuentros que se jugaron mientras nosotros pasábamos las vacaciones en Mallorca. Lo consiguió. Nunca tuve la sensación de haber perdido una oportunidad histórica… hasta que hace unos días me dio por buscar las alineaciones y los escasos vídeos de Youtube de aquellos choques.
En1994 me enamoré de la selección sueca. Seguí su camino hacia el tercer puesto, imité en la playa las celebraciones de Kennet Andersson y lloré porque no me despertaron para ver la semifinal contra Brasil. Lo que en aquel momento no sabía -y menos mal- es que varios integrantes de aquel equipo sueco habían jugado en Sabadell dos años antes un partido de los Juegos: una victoria por 4-0 ante Marruecos en la que dos goles fueron obra de Tomas Brolin, el más talentoso de los héroes del 94.
Noticias relacionadas
Cuento esto porque, hace cosa de un mes, un oyente de mi podcast, Carlos Pérez, publicó el siguiente mensaje en nuestro canal de Telegram: “Veo que el Ulsan-Mamelodi se jugó frente a 3.000 personas. ¿Creéis que si ese partido se juega en La Condomina (la vieja) habría más o menos gente?”. Fue, de hecho, lo que me hizo ir a buscar qué partidos se habían disputado en Sabadell en el 92. Y no sé la respuesta, ni tampoco sé muy bien a dónde quería ir a parar. Pero en un mundo en el que todo se mide en términos de reclamos, de llevar a los nombres más llamativos para captar las mayores audiencias, me gustó recordar que la idea original de estos grandes eventos era, simplemente, entretener a la gente de los lugares en los que se celebraban. Una gente que se acercaba al estadio de su ciudad con curiosidad, quizá sin saber nada de los protagonistas, sólo con el propósito de pasar un buen rato.
¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de . ¿Buscas licenciar contenido? Haz clic
Rellene su nombre y apellidos para comentar