Vingegaard acecha a Pogacar

El Tour de Francia llega a su primera jornada de descanso. El primer tercio oficioso de la carrera ha durado casi hasta el ecuador. Y lo ha hecho sin pisar todavía una gran montaña. Han sido diez etapas a la vieja usanza, con encadenamientos de esprints, con dificultades para perfiles clasicómanos, con la media montaña del Macizo Central, con abanicos, nervios y caídas… El único enfrentamiento directo entre los favoritos ha sido una contrarreloj, que por ahora está resultando determinante. La diferencia actual entre Tadej Pogacar y Jonas Vingegaard es la suma de la crono y las bonificaciones. No hay más. La clave, hasta la fecha, es que el danés falló justo el día que se esperaba que estuviera por encima de su rival. Fue una rareza, porque la imagen que ha desplegado el resto de jornadas no se corresponde con la pérdida de más de un minuto de aquella batalla en Caen.

Fuera de esa anomalía, y de que Pogacar es un ciclista más pegador y ya ha logrado dos victorias, Vingegaard no se está mostrando por debajo de su rival. Al contrario, en algunos detalles parece por encima. El nórdico ha resistido las dos embestidas que le ha lanzado el esloveno, en el Muro de Bretaña y en el Mont Dore. A eso tenemos que añadir que el Visma está exhibiendo un equipo bastante más fuerte que el UAE Team, que para colmo ha perdido a su segundo espada, João Almeida. La escuadra holandesa no ha parado de enredar en todos los terrenos. Y es fácil deducir que doblará la apuesta cuando llegue la montaña de verdad. Por victorias y por su ventaja, podemos tener la sensación de que Pogacar domina este Tour. Y es muy posible que sea así. Pero aún no hemos visto un gran puerto. Y falta la mitad de la carrera por delante. La más dura. Vingegaard sigue al acecho.

¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de . ¿Buscas licenciar contenido? Haz clic