Xabi Alonso sale fortalecido de este Mundial

Reconozco que vi el partido con otros ojos después de los errores infantiles de Asencio y Rüdiger. Esos dos chistes de mal gusto condenaron el planteamiento de Xabi y desvirtuaron por completo todo lo que se vio después, la actuación del Madrid y también la del PSG, que no mostró su verdadero potencial con la semifinal ya resuelta, como si no quisiera hacer más leña del árbol caído. Por eso el análisis debe hacerse sobre lo que deja este Mundial para el Madrid y no sobre este último encuentro. Y deja mucho, y muy bueno.

Para empezar, el Madrid ha ingresado 75 millones en caja. Sólo eso justifica el esfuerzo. Nadie contaba con el equipo en semifinales. La apuesta de Xabi Alonso fue muy arriesgada aceptando el reto de ir a EE UU y ha resultado claro ganador.

En muy poco tiempo ha arreglado mucho, aunque es evidente que queda mucho por hacer. Se ha inventado a Gonzalo, el ‘9’ puro que andaba buscando el club para tener un Plan B, resucitó a Tchouameni hasta convertirlo en vital para ese sistema híbrido entre el 5-3-2 y el 4-4-2, reubicó felizmente a Güler y relanzó a Fran García.

Pero este final tan amargo pone los pies en el suelo y abre varios debates. ¿Hace falta fichar otro central? ¿Hace falta fichar a un Vitinha que asegure sentido y posesión en el juego? ¿Era necesario comprar a Mastantuono y no dedicar ese esfuerzo a otras líneas? Sea como sea, en este Mundial se ha andado mucho camino de cara a la próxima temporada.

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