Susto en Cincinnati: Rinderknech se retira tras sufrir un desmayo
El tenista francés sufrió un desmayo debido al calor en el segundo set ante Auger-Aliassime. Se tuvo que retirar dos juegos después.
Arthur Rinderknech ha protagonizado el susto de la jornada en el Masters 1.000 de Cincinnati. El francés, número 70 del ranking ATP, ha sufrido un desmayo debido al calor en la tercera ronda ante Félix Auger-Aliassime, situación que le ha obligado a abandonar el torneo dos juegos después.
El duelo transcurría con normalidad, aunque las condiciones no eran las más adecuadas para la práctica del deporte de élite con 32ºC y alrededor de un 50% de humedad. Aliassime se llevó la primera manga en el tie-break, hasta que llegó el susto en el segundo set.
Tras poner el 2-2 en el marcador con su saque, Rinderknech acudió al fondo de su lado de la pista y se fue directamente al suelo tras taparse la cara con la toalla. Visiblemente mareado, el francés estuvo unos segundos tumbado, con los ojos cerrados y el pulso por las nubes a tenor de lo que indicaba su respiración.
Image impressionnante : Arthur Rinderknech s'est écroulé sous la chaleur à Cincinnati. Le Français s'est relevé avant d'abandonner quelques jeux plus tard.
— Eurosport France (@Eurosport_FR)
Todas las alarmas saltaron en la pista. El juez de silla y Aliassime se acercaron al jugador, así como los servicios médicos, que acudieron con agua, toallas y bolsas de hielo. Instantes después, Rinderknech se levantó por su propio pie, notablemente afectado, y pidió perdón a Aliassime antes de continuar con el partido.
El tenista canadiense sacó adelante su servicio, Rinderknech recibió asistencia médica en el paso por banquillos y en el 2-3, con su saque, volvió a hacerse patente que no estaba en condiciones de continuar compitiendo. Y es que hizo un amago de saque al lanzar la bola hacia arriba y no pudo golpearla, llevando inmediatamente la mirada hacia el suelo y perdiendo el equilibrio. Acabó cediendo un break y, con set abajo y 2-4 en contra, tomó la decisión de retirarse.
“Un jugador se va a morir y todos lo verán”
Esta situación ha vuelto a poner en tela de juicio la decisión de competir en Cincinnati durante las horas centrales del día en pleno verano. Antes de que el calor hiciera mella en Rinderknech, Daniil Medvédev ya hizo estragos por el mismo motivo en el día de ayer, cuando cayó derrotado ante Adam Walton (85). El ruso llegó a meter la cabeza en una de las neveras que los jugadores tienen a su disposición en los banquillos y protagonizó una imagen muy llamativa tras ceder el segundo set, ya que se quitó la camiseta, se puso varias toallas frías encima de la cabeza y apuntó con el aparato de aire acondicionado a su cara mientras cerraba los ojos.
Daniil Medvedev on the conditions in his match against Andrey Rublev:
— The Tennis Letter (@TheTennisLetter)
“One player is gonna die. And they’re gonna see.”
Precisamente, ya fue Medvédev el que puso el grito en el cielo por esta cuestión en el US Open 2023, cuando afrontó los cuartos de final ante Andréi Rublev en unas condiciones muy similares a las que vivió ayer él y hoy Rinderknech. “Un jugador se va a morir y todos lo verán”, dijo a la cámara mientras se secaba el sudor con una toalla. Hoy sus palabras vuelven a ser recordadas, y con razón.
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