Dos cachorros de labrador emocionan al mundo entero tras conocer su mayor secreto: separadas al nacer

Stella y Roxie se conocieron en una guardería canina de Victoria, Australia, cuando solo tenían cinco meses. Desde el primer día jugaron como si se conocieran de toda la vida, pero lo que parecía una simple amistad entre perritas, no tardó en convertirse en algo mucho más grande. Estamos ante una historia real que ha conmovido a miles de personas en redes sociales.

Ambas tenían un carácter idéntico, eran del mismo tamaño y color, y llevaban collares muy parecidos. Pero lo que más sorprendió a sus dueños fue descubrir que también compartían la misma fecha de nacimiento. Esa coincidencia despertó la curiosidad de los tutores de Stella, que decidieron escribir al criador de donde la habían adoptado. La respuesta no tardó en llegar: Stella y Roxie eran hermanas, nacidas en la misma camada y adoptadas por familias distintas.

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Ambas supieron que eran hermanas nada más verse

Lógicamente, la historia no tardó en hacerse viral. El dueño de Stella la compartió en con una foto de las dos perritas abrazadas, mientras que la tutora de Roxie publicó la noticia en Instagram: “Cola agitándose. Hocico en alerta. Collares a juego. ¿Qué probabilidades había de que se reencontraran así?”. Las redes no tardaron en reaccionar con miles de mensajes llenos de ternura.

Lo más curioso es que la ciencia respalda este tipo de reencuentros. Según del investigador Peter G. Hepper, de la Universidad de Queen’s de Belfast, los cachorros son capaces de reconocer a sus hermanos y a su madre por el olor, incluso tras varios meses sin contacto, siempre que hayan convivido juntos al menos hasta las ocho semanas, como fue el caso.

Para los perros, el olfato funciona como una memoria emocional. Así lo explica la especialista , de Woodgreen Pets Charity: los canes no se reconocen tanto por la vista como por los olores. Por eso, cuando Stella y Roxie se volvieron a ver, puede que algo dentro de ellas supiera exactamente quién era la otra.

Desde que descubrieron que eran hermanas, sus dueños han decidido mantenerlas unidas. “Vamos a asegurarnos de que se sigan viendo aunque dejemos de llevarlas a la guardería”, contó el tutor de Stella. Desde entonces, no solo disfrutan de correr y dormir juntas. También saben que son familia, y eso hace su vínculo aún más especial.

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