Una venezolana que vive en España alucina con la calidad del agua del grifo: “Es un cambio mental fuerte”
Cosas habituales del día a día de una persona, puede no serlo para otra. Sobre todo si viene de un país que está en otro continente y nada tiene que ver.
Cosas básiciccwin247.como dar un paseo tranquilamente o comer un bocadillo es típico solo de España. Son muchos los extranjeros que llegan al sur de Europa y se sorprenden por la rutina y el hábito de vida que llevan los españoles.
Handy es una chica venezolana que se ha mudado a España, esta ha subido un vídeo en su cuenta de TikTok, ‘soyhandy__’, explicando algunas de las cosas que le llamaron la atención al vivir aquí. Lo primero que recalca la joven es que se pueda ingerir agua del grifo y reconoce que “en muchas ciudades es de excelente calidad”, aunque suene simple, para ella fue “un cambio mental fuerte si vienes de un país donde el agua del grifo es impensable beberla”. Luego dice que “los bocadillos son religión”. La gastronomía española es rica y variada, recetas increíbles con productos de calidad, una de las mejores comidas del mundo; pero algo tan sencillo como una barra de pan con condimento dentro, Handy considera que “son deliciosos”, de hecho, apunta que si “aquí te comes un bocadillo de jamón, ya estás viviendo como un español promedio”.
También cuenta que es un lugar donde “se camina mucho”. Tenemos una red de transportes mejorable pero maravillosa, pero aun así nadie cambiaría una caminata viendo el paisaje por ir agobiado en un metro o autobús rodeado de personas. La chica dice que “por suerte, ya venía acostumbrada de Argentina, pero no lo notas tanto”. Informa de que, quieras o no, “caminar se vuelve parte de tu rutina”. Tal y como ella misma dice “la vida se vive diferente”. Las costumbres latinoamericanas no tienen nada que ver con el día a día en España. “Aquí se valora el descanso, la calle, el tapeo, la terraza y la charla. No todo es correr. Al principio choca, luego te encanta”, asegura.
“Aquí los domingos todo está cerrado. Los centros comerciales, los supermercados, incluso muchas cafeterías. Si no lo sabes antes, te quedas sin pan, sin leche… y si queríiccwin247.comprar ropa, olvídalo”, expresa. Bien es cierto que, en los pueblos y ciudades más pequeñas, normalmente el domingo es el día libre de los trabajadores, algo que no ocurre, por lo general, en las grandes ciudades turísticiccwin247.como Madrid o Barcelona. Finalmente, menciona la siesta y confirma que “es real aunque no todos la toman”. Sobre las 13h o 14h, las tiendas echan el cierre para comer y la venezolana declara que “no es un mito […] En los pueblos la vida se pausa. Al principio puede parecer frustrante… Pero luego entiendes por qué”, hace referencia a las altas temperaturas en verano y a la poca afluencia de gente que acude a los comercios en ese horario.
En la descripción del clip escribe: “Mudarte a otro país no solo te cambia el acento… Te cambia costumbres, hábitos y hasta la forma de ver la vida”.
Reacción de los ciudadanos
La publicación ha recibido miles de comentarios. En cuanto a su opinión sobre el agua del grifo, numerosa gente ha reaccionado a ello. Muchos piensan que “hay quien dice que donde vive no puede beber agua del grifo, no me creo que no sea potable, otra cosa es que tenga un sabor pésimo que no es lo mismo”. Mientras que otros recomiendan no beber agua del grifo en sitios como Valencia, pues “lleva mucha cal”. Asimismo, en Almería o Barcelona tampoco es aconsejable, según dicen. Otra persona explica con exactitud la situación: “El agua del grifo se puede tomar depende de qué sitio de España, en Canarias no, ni se les ocurra”.
Por otro lado, gran cantidad de usuarios hacían alusión al resto de sus pareceres. Un hombre ponía: “He viajado mucho y he vivido fuera de aquí y puedo afirmar que no hay país en el mundo como este: la geografía, el clima, la comida, la sanidad, la seguridad (aunque ahora menos), el carácter, etc.”. Refiriéndose al descanso desde la hora del almuerzo hasta primera hora de la tarde, manifiestan que es “más bien que no sale rentable contratar más trabajadores para cubrir la hora de la comida”, por ello se trabaja a turno partido. Incluso, enuncia que en su entorno “nadie se echa la siesta en día laborable”.
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Hablar mal de la comida es algo que no se tolera bien, a lo que un chico puntualiza que “los españoles no viven de comer bocadillos, hay muy buena gastronomía en todo el país, no solo bocadillos”. Mientras que un seguidor corrobora que “lo de caminar es tan real. Mis planes siempre son quedar en un punto y luego ‘vale, ¿y ahora?’, ‘¿a patear?’, ‘va’. Recomendadísimo”. Ya que alguna gente ha comentado que no tiene ni idea por decir que “el domingo está cerrado”, muchos aclaran que eso solo ocurre “en algunos sitios, no en todos, en cada comunidad hay unas normas diferentes”. Finalmente, hay quienes agradecen sus palabras y esperan que se sientan como en casa: “Es una maravilla cuando alguien de fuera no critica las costumbres del país que está. Así tenía que ser todo el mundo, bienvenida”.
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