Después de las sorprendentes imágenes de las tribunas en las primeras dos jornadas del Mundial de Clubes, en el Hard Rock Stadium de Miami y en el Rose Bowl de Pasadena, las postales ahora son menos positivas. Más de 10,000 asientos vacíos en el Chelsea-LAFC en Atlanta. Y, ahora, menos de medio aforo en Lumen Stadium. 11,974 personas atestiguaron el partido entre River Plate y Urawa Red Diamonds en Seattle, según FIFA. Un partido de Mundial en un estadio al 17.4% de su capacidad. Un duelo a mediodía en plena jornada laboral de media semana.

La mayoría de los aficionados que acudieron al coliseo que comparten los Seattle Seahawks y los Seattle Sounders fueron argentinos (alrededor de 8,000), pero hubo una nutrida barra japonesa, enteramente roja, que convirtió la cabecera sur del Lumen Field en su trinchera. Con los brazos en alto, los tamborazos constantes y cánticos que no piden nada a los sudamericanos, la hinchada nipona no guardó silencio en ningún momento. La icónica tribuna norte del Lumen Field, un triángulo que voltea al downtown de Seattle, fue exclusivamente ‘millonaria’, aunque el ruido y el color lo pusieron los ‘Reds’.

Pese al ambiente, los huecos en las gradas fueron notorios y el partido se desarrolló con el aroma y el entorno de una exhibición veraniega. E incluso con relativa tranquilidad, de no ser por los fans japoneses. Las tribunas paralelas al campo de juego no se llenaron y toda la sección superior del estadio se mostró completamente desierta. Ni un sólo aficionado por arriba del anillo de palcos y pantallas.

“Una sede poco amena”

Hace dos días, durante el duelo entre Botafogo y Seattle Sounders, la asistencia fue menor al 50% del Lumen Field. 30,151 aficionados para un partido de Mundial. Domingo, equipo local; el campeón de América como rival. Ahora, el River-Urawa, no llamó la atención del público neutral de Seattle. Ya había advertido Marcelo Gallardo, técnico de ‘La Banda’, en la rueda de prensa previa: “No nos tocó suerte en el sorteo con la sede. No es una ciudad amena para nuestros aficionados”.

En contraste con la fotografía, FIFA presume de la convocatoria que tiene su reformado Mundial de Clubes. Más de 340,000 aficionados y 1.5 millones de boletos vendidos a lo largo de las 12 sedes, al momento, según un comunicado de prensa divulgado por la Federación la tarde de este martes, justo tras el inicio del partido River-Urawa.

Un cotejo de Mundial de Clubes a mediodía de un martes bajo el sol de la Costa Oeste. Muy lejos de Argentina, de Miami, y del tinte de un Mundial.

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