Se cumplen siete años del último ascenso del Rayo a Primera
El 22 de mayo de 2011 los franjirrojos se impusieron al Xerez (3-0), con goles de Trejo, Armenteros y Susaeta, y volvieron a la élite.</br><a title='Rayo - Huesca en directo: LaLiga Santander, jornada 33' href='http://iccwin247.com/futbol/2019/04/20/primera/1555774448_852763.html'>Rayo - Huesca en directo: LaLiga Santander, jornada 33</a>
Siete velas en la tarta. Siete años ya a sus espaldas. El último ascenso del Rayo a Primera cumple este martes su séptimo aniversario. Y lo hace justo unos días antes de que se pueda certificar el regreso de los franjirrojos, de nuevo, a la máxima categoría. Aquel 22 de mayo de 2011, aquella mañana, sigue en la memoria de la afición vallecana.
Estaba siendo un temporada difícil. Los impagos habían sacudido a la plantilla, al cuerpo técnico... a todos los empleados del club y el ascenso era vital para la supervivencia del Rayo, inmerso en esa voraz situación. Ese clima dotó de una mayor trascendencia aquel logro que pasó a catalogarse de gesta, de epopeya...
Volvamos a esa mañana del 22 de mayo de 2011, día también de elecciones municipales y autonómicas. El Rayo se pasó toda la primera parte rondando el gol, pero el guardameta del Xerez, Chema, desbarató las ocasiones de los locales. Ya tras el descanso, Trejo abrió el marcador valiéndose de una gran jugada de Aganzo.
Las esperanzas visitantes se disiparon definitivamente cuando Armenteros robó un balón a Raúl Llorente e inició una contra que culminó regateando al guardameta rival. No terminó ahí la cosa, Susaeta remató la faena a cinco minutos del final, con un golpe franco al borde del área. El resto... fotogramas que se agolpan en la mente.
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La afición saltando al césped a celebrar el ascenso. Armenteros subido a una portería. Piti y su peluca morada. Sandoval y sus jugadores dando las gracias, micro en mano, en el centro del campo. La Vida Pirata atronando en cientos, qué digo en cientos, en miles de gargantas. Diez mil almas en la Fuente de la Asamblea. Fotogramas que siete años después siguen indelebles.
"Todavía tengo en el teléfono un vídeo con el resumen del partido y los festejos. Cuando estoy de bajón me pongo aquel gol al Xerez", recuerda uno de los héroes de entonces, Trejo, llamado a serlo, ahora, de nuevo.