Leire, la mirada del Espanyol

Se llama Leire Acosta, es una joven seguidora del Espanyol y en las últimas horas está convirtiéndose en la merecida protagonista de la generosidad perica, a raíz de la aparición de su caso en diversos medios. Leire sufre una de las llamadas enfermedades raras, concretamente PKU o Fenilcetunoria, una alteración congénita cuyo diagnóstico es que no se metaboliza bien un aminoácido, lo que puede desembocar en daños cerebrales irreversibles.

Este aminoácido, presente en las proteínas de alimentos tan comunes como la leche, el pollo, las patatas o los refrescos de Cola, obliga a calcular al milímetro la ingesta para no caer en peligrosas descompensaciones. En caso de riesgo, hasta ahora solo se pueden verificar los niveles de proteínas en sangre mediante un análisis en un centro hospitalario que, según el paciente, puede encontrarse a cientos de kilómetros de distancia. Y ello se ha convertido en el caballo de batalla de organizaciones como el Hospital Sant Joan de Déu de o la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB), que tienen en marcha el denominado Proyecto Biosensores.

La Fundación PKU y Otros Trastornos Metabólicos Hereditarios lidera esta causa que consiste en la investigación para desarrollar un dispositivo portátil de medición, que mejoraría la calida de vida de las personas con esta enfermedad y, por supuesto, evitaría daños mayores. Por este motivo, se ha puesto en marcha y a las niñas y niños que se ven aquejados por la PKU, que ha cautivado a la afición del Espanyol por su cristalina mirada blanquiazul.