Guardado multiplica las dudas
La lesión del jugador mexicano genera inquietud en la planificación del Betis. Se ausentará de toda la pretemporada y ello condicionará el inicio de curso.
Guardado estará fuera de los terrenos de juego de cuatro a seis semanas. Esta nueva realidad abre un escenario inesperado en Heliópolis y Manuel Pellegrini ya baraja un verano condicionado a la hora de preparar el inicio de la próxima campaña. Su plantel regresa este lunes a la ciudad deportiva, aunque la previsión con Guardado era ya de un regreso tardío debido a su papel con su selección. Pero la lesión multiplica las dudas sobre si podrá estar a disposición del técnico en el inicio de la Liga y por ello las alarmas ya están encendidas sobre el estado físico del medio centro, clave en los planes del equipo en esta última campaña.
El liderazgo y la capitanía de Guardado supone un valor fundamental para Pellegrini. Su ausencia deja abiertos los plazos sobre su vuelta, pero el técnico ya contempla un escenario de pretemporada sin que llegue el mexicano. Ya se conoce la importancia que tiene este periodo de preparación para el chileno, que insistió en tener gran parte de su plantel ya en escena para estas próximas fechas. Cree de forma rotunda en que la preparación veraniega resulta muy valiosa para el rendimiento del equipo a lo largo de la temporada y la ausencia de Guardado se presenta como un contratiempo inesperado.
Tiene el Betis piezas de sobra para encarar el inicio del curso sin Guardado, pero la dirección deportiva está atenta a cualquier movimiento que pueda trastocar el plan inicial para su centro del campo. Pellegrini considera que Víctor Camarasa es el gran refuerzo para esa posición tras recuperarse de su lesión y sí mantiene cierta incertidumbre sobre el futuro de William Carvalho, que tiene al Benfica tras sus pasos pese al irregular rendimiento mostrado en la Eurocopa con la selección portuguesa.